La encrucijada de afrontar un monstruo del 70-80%
Desplegamos velas, estimados lectores, en un tema que desafía a los corazones más audaces: la ejecución de un proyecto, esa bestia inmisericorde que se traga el 70-80% del tiempo y recursos totales en cualquier aventura empresarial digna de mencionarse.
El valiente Gestor de Proyectos y sus hazañas más destacadas
Aquel intrépido ser que acepta la tarea de Gestor de Proyectos tiene ante sí un sinnúmero de retos que, a manera de combate cuerpo a cuerpo, debe enfrentar. Entre sus responsabilidades durante esta batalla se encuentran: la dirección y coordinación del trabajo del equipo, la calidad del proyecto, la adquisición y desarrollo de recursos humanos, gestionar las comunicaciones, dirigir las adquisiciones y, por si fuera poco, lidiar con las querellas y caprichos de los volubles stakeholder.
Apoyos, asistentes y otros auxilios
A medida que la envergadura del proyecto aumenta, como si se tratara de unos brazos rebasados, esta carga acumulada puede llegar a ser demasiado pesada para la gestión por parte del Gestor de Proyectos. Entonces, para mantener el rumbo, necesitará apoyos provisionales en algunas de sus tareas.
El todoterreno Jefe de Proyecto en las contiendas más pequeñas
En los proyectos de menor escala, nuestro valeroso Jefe de Proyecto debe cumplir, además, con tareas adicionales como adquirir materiales, planificar en detalle y ejecutar permisos en búsqueda de la gloria.
Mantener la estrategia con el PMBOK a mano
Algunos eruditos expertos sugieren que el PMBOK es un tesoro desconocido al que todos debemos acudir; en sus páginas, el libro de resiliencia que describe las actividades del aguerrido Jefe de Proyectos durante la fase de ejecución de dichas empresas.
Las comunicaciones y las relaciones con stakeholders
Mantener vívidas líneas de comunicación y engañosas relaciones con los stakeholders tiene la consideración de arte entre los expertos, siendo esta habilidad crucial para compartir secretos y debatir aspectos importantes que determinen el éxito de la magna obra.
Ejecución: El tránsito por el tortuoso camino hacia el objetivo
La ejecución de un proyecto consiste en abordar cada una de las tareas previstas en su planificación para alcanzar la meta propuesta al inicio. Anhelamos ese momento en el que, navegando entre tormentas y mares bravos, encontramos el rumbo y sabemos que hemos llegado al puerto ansiado.
El director de proyecto: indispensable timonel
Para que la nave no naufrague y el objetivo se cumpla, es necesario contar con un sólido y experimentado director de proyecto que coordinará con sabiduría y buen juicio a todos los implicados, supervisará cada escollo del camino y se encargará de llevar al éxito al equipo.
Etapas para ejecutar un proyecto digno de Odiseo
En nuestra épica travesía, las etapas para ejecutar el ansiado proyecto se nos presentan como singladuras de un vasto océano: comenzamos con las tareas establecidas, nos arrojamos a la cresta de la ola de comunicación, supervisamos y controlamos el proceso desafiante, y por último, gestionamos y corregimos desviaciones de la ruta hasta llegar a nuestra Ítaca.
El proyecto informático de una tienda de regalos: un ejemplo para la posteridad
Ilustremos, queridos navegantes, con un ejemplo a seguir. Imaginemos un proyecto de software informático para una humilde pero rutilante tienda de regalos. En este caso, se recorre el camino mencionado, sorteando incertidumbre y tribulaciones hasta alzar la bandera del éxito en tierras soñadas.
El apoteósico clímax de cualquier historia de éxito
Nuestro coraje y tenacidad nos llevan a transitar por todas las fases del proyecto, pero ninguna tan esencial como la ejecución: la tercera en una sucesión de cinco etapas, que nos permitirá ganarnos el relato de nuestra gesta épica.
La relevancia de la ejecución en la gestión del proyecto
Porque, ¿qué más esperan de nosotros, valientes luchadores, si no ese momento en el que cada simulacro y artefacto ideado en nuestra estrategia y planificación son puestos a prueba en el campo de batalla? La ejecución, amigos míos, es la etapa que definirá si salimos airosos o, por el contrario, nuestros esfuerzos mueren en nobles intentos.
El seguimiento y la supervisión: nunca sin sus fiables compañeros
Sin duda, la sed insaciable de aquel que se adentra en este laberíntico desafío nos lleva a la inevitable realidad de que la ejecución está íntimamente ligada al seguimiento y la supervisión durante toda la gestión del proyecto, garantizando la calidad del producto como trofeo final de victoria.
Las tareas clave durante la ejecución de proyectos
Las cartas náuticas que un buen gestor de proyectos ha de contemplar durante la ejecución de cualquier proyecto van desde el monitoreo y control de la tempestad, hasta informar de los avances entre oleadas, pasando por concertar reuniones de seguimiento y gestionar los problemas que sin duda acecharán a nuestro equipo en la travesía.
Estimaciones de tiempo y costos: la cartografía de la gestión de proyectos
Una buena estimación sobre costos y tiempos es punto cardinal en la bitácora de nuestro temerario aventurero. En esta ciencia que es también el arte de la vida laboral, la selección de ciertas herramientas auxiliares como el cronograma, el plan de manejo del alcance o el histograma de recursos configuran sobre el papel el mapa para evitar escollos y llegar al puerto seguro del éxito.
Resumiendo
En este artículo se aborda la ejecución de proyectos, que consume entre el 70 y 80% del tiempo y los recursos en cualquier empresa. La figura del Gestor de Proyectos tiene una tarea ardua al enfrentarse a múltiples desafíos en su camino hacia el éxito, entre ellos, dirigir y coordinar al equipo, gestionar los recursos humanos, comunicarse con los stakeholders y gestionar las adquisiciones. La ejecución es una de las etapas más cruciales y requiere un seguimiento y supervisión constante, estimaciones precisas de tiempo y costos y el uso de herramientas auxiliares para garantizar la calidad del producto final y lograr el éxito en la empresa.
