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Las curiosas normas y lo que no se puede hacer en una biblioteca

Debido a la importancia de mantener el silencio en una biblioteca y no perturbar el estudio de los demás, se han establecido diversas normas de comportamiento. Aunque algunas de ellas pueden ser obvias, otras podrían sorprenderte. Aquí te presento una lista de las cosas que no se deben hacer dentro de estos templos del conocimiento.

El valor del silencio: Un respeto por los demás

No es un secreto que el silencio es fundamental para concentrarse y estudiar. Pero, también hay tics evitables que a veces olvidamos controlar al estar en la biblioteca. Los susurros, las risas entre dientes y, sobre todo, el uso del teléfono móvil pueden ser perturbadores para otros estudiantes, llegándo a causar molestias.

Los datos nos demuestran que hoy en día, según una encuesta, los usuarios suelen consultar su móvil alrededor de 150 veces al día. Por eso, es fundamental dejar el aparatito a un lado cuando estamos en la biblioteca.

El arte de comer… fuera de la biblioteca

Es tarea de todos mantener las instalaciones limpias y ordenadas. Aunque se permiten pequeños snacks como caramelos, se aconseja no comer en la biblioteca, ya que los derrames y migajas pueden ensuciar el espacio que todos compartimos.

Zonas apropiadas para cada tipo de estudio

La biblioteca está dividida en diferentes áreas según las necesidades de los usuarios. La zona informática es ideal para quienes necesitan hacer trabajos de investigación, mientras que la zona de estudio en grupo es perfecta para esas sesiones de brainstorming con compañeros de clase.

Y no olvides respetar el espacio personal de otros estudiantes. Podemos sentirnos tentados a invadir el espacio de otro usuario, pero recordemos que todos merecen un lugar tranquilo para leer y trabajar.

Algunas restricciones curiosas

Se mencionan algunas prohibiciones llamativas en una biblioteca, como no se permite llevar monopatines, ni tacones. Si piensas llegar a la biblioteca con ese calzado de moda, mejor opta por unas zapatillas cómodas (y silenciosas).

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Deja los documentos en su sitio

Cuando consultamos libros y documentos en una biblioteca, a veces olvidamos devolverlos correctamente. Se recomienda no volver a poner los documentos consultados en la estantería, sino dejarlos en las mesas dispuestas para tal fin. De esta manera, las personas encargadas de ordenar los libros podrán hacerlo con facilidad.

Aprovechando el tiempo en la biblioteca

Si por algún motivo te encuentras aburrido en una biblioteca o simplemente necesitas un descanso de tus estudios, existen opciones para pasar el tiempo. Algunos videos de YouTube ofrecen consejos y opciones divertidas para pasar el tiempo en la biblioteca sin molestar a los demás, como “Formar una banda en la biblioteca”, donde se sugiere una forma creativa de utilizar el espacio para disfrutar de la música.

Las bibliotecas en nuestra cultura

A pesar de la disminución en la asistencia a bibliotecas, estas siguen siendo una parte esencial de la vida de las personas. La Encuesta de hábitos y prácticas culturales 2018-2019 muestra que el grado de interés en las bibliotecas está calificado con un 3,1 sobre 10.

Sin embargo, solamente el 23% de las personas afirmaron haber acudido a una biblioteca en el último año. Las personas que utilizaron las bibliotecas calificaron su experiencia con un 8,2 sobre 10, lo que implica que aquellos que las visitan, disfrutan de su experiencia.

¿Qué actividades realizamos en la biblioteca?

La principal razón por la que las personas acuden a la biblioteca es estudiar, siendo elegido por el 29,4% de los encuestados. Esto demuestra la importancia de respetar las normas, ya que la mayoría va allí para concentrarse y aprender.

Otras actividades incluyen el préstamo de libros, la lectura de revistas y periódicos, la asistencia a actividades organizadas y el uso de Internet. Además, las bibliotecas son un lugar para encontrarse con compañeros, siendo la sexta razón más mencionada en la encuesta.

En conclusión, las bibliotecas son espacios sumamente valiosos e importantes en nuestra sociedad. Para mantenerlas en óptimas condiciones, es fundamental conocer y respetar las normas de comportamiento. Así, todos podremos disfrutar de un ambiente adecuado para el aprendizaje.